Una ambiciosa propuesta del Senador Ray J. Lesniak anunciada a bombo y platillo por él mismo en rueda de prensa a finales de Noviembre y presentada en Diciembre al Senado pretende admitir licencia a operadores online para ofertar juegos y apuestas fuera del territorio de EEUU, como podría ser España y jugadores españoles. Ante tan sorprendente anuncio que puede hacer temblar a los reguladores en los despachos de la Comisión del Juego de Malta o de la propia Dirección General de Ordenación del Juego en Madrid, conviene hacer un análisis de la propuesta para comprobar si realmente se trata o no de una broma.
Si se aprobase el nuevo Proyecto de Ley nº 3084 l el regulador de Nueva Jersey podría otorgar licencias a operadores para ofrecer juego por Internet a extranjeros bajo determinadas circunstancias. Veamos las cuestiones más importantes e interesantes que apunta el Proyecto:
– El juego online podrá ofrecerse a personas mayores de 21 años que estén LOCALIZADAS fuera del estado de Nueva Jersey así como fuera del resto del territorio de Estados Unidos.
– Los licenciatarios de una “licencia restringida de juego por Internet extranjero ” (*1), como los denomina el Proyecto, únicamente podrán llevar a cabo sus actividades en aquellas jurisdicciones en las que dichas actividades sean legales.
– Se podrá ofrecer cualquier juego online incluido las apuestas deportivas salvo las apuestas hípicas. Las apuestas deportivas tendrán que ser sobre eventos que tengan lugar fuera de EEUU.
– Los servidores de los licenciatarios deberán de alojarse dentro del territorio de Atlantic City. Las instalaciones, la maquinaria e incluso el personal también deben de encontrarse dentro de esta ciudad.
– Las actividades de juego online que realicen los licenciatarios se entenderá que se realizan en Atlantic City independientemente de donde se encuentre el jugador a efectos de la regulación aplicable.
– Los licenciatarios no podrán realizar préstamos al jugador.
– La tasa que debe de pagar el licenciatario para obtener el permiso anual no será menor de 200.000$. La tasa de renovación de este permiso anual será de mínimo 100.000$. También será exigible un depósito no reembolsable de 100.000$. a cuenta de la tasa del permiso inicial. A ello se sumarán el pago de 100.000$ de los cuales 85.000$ se destinan al Consejo de juego Compulsivo de Nueva Jersey y 15.000$ se destinan a programas de tratamiento de juego compulsivo.
– El impuesto de juego (Fondo de ingresos de Casino) será de un 15% sobre ingresos brutos. A ellos se le suma el impuesto de inversión que es de un 5% sobre los ingresos brutos que se reserva al Estado o, alternativamente, el impuesto de reinversión que pasa a ser el 2.5% sobre los ingresos brutos cuya cantidad se destina al Casino Reinvestment Development Authority Project Funding. Pero ojo, según el Proyecto de Ley el licenciatario que haya de pagar una cantidad igual en concepto de impuestos “homólogos” en un país extranjero tendrá derecho a reclamar las cantidades de los impuestos establecidos en la normativa de Nueva Jersey para que, en definitiva, no se produzcan duplicidades.
Con esta Ley el Senador quiere conseguir lo que la joven Ley de juego online de Nueva Jersey( *2) no ha hecho hasta el momento, que es verdaderamente crear puestos de trabajo (y cualificados) en Nueva Jersey, así como atraer turismo y revitalizar Atlantic City. Tanto es así que el Proyecto establece expresamente la legalidad de las estrategias de marketing dirigido a jugadores a que sean incentivados a visitar los casinos presenciales e incluso cualquier otra actividad que tenga lugar en el Estado de Nueva Jersey.
Dicho esto, se pueden preguntar qué supone esto para las licencias otorgadas a los 12 casinos presenciales para ofertar juego online en Nueva Jersey. Nada. No será perjudicial en términos de competencia pues los jugadores son otros. La masa de jugadores “internacionales” no podrá mezclarse con los nacionales pero ¿podrá esto llevar a resolver de alguna manera la cuestión de la liquidez internacional? Aunque de entrada, como decimos, se estaría excluyendo a los jugadores localizados es EEUU: La explosiva idea del Senador es atraer con todo ello la Ryder Cup del póquer a Atlantic City al mezclar en el mundo presencial, ahora sí, a jugadores internacionales con los mejores de Nueva Jersey.
Otras de las cuestiones que seguramente se pregunten es por qué motivo un operador licenciado en paraísos fiscales o jurisdicciones con una tributación más laxa como Isla de Man o Gibraltar querría llevar sus operaciones a Nueva Jersey. El Senador parece tenerlo clarísimo. Según éste, la reputación de la regulación y normativa que imponen toda una serie de parámetros de seguridad y control otorgaría credibilidad y seguridad al producto, además de situarse en el eje financiero. A ello le añade las instalaciones de alta tecnología con las que cuentan y la alta educación de los potenciales trabajadores.
Sin duda al Senador se le han hecho los ojos chiribitas al saber que el mercado de juego online mundial es de 10 mil millones de dólares, al menos según las cifras que él ha manejado. Por no decir de los datos que le ha aportado desde la consultoría Econsult Solutions que estiman que con la nueva normativa se ingresaría anualmente en las arcas de 2.2 a 3.8 mil millones de dólares y entre 11,000 y 16,000 empleos nuevos. Si pensamos en el reconocimiento de impuestos pagados en el país de origen anteriormente señalado los verdaderos beneficiarios serían precisamente estos últimos, los del país donde se encuentre el jugador, no Nueva Jersey. De la misma manera, las cifras sobre la creación de empleo resulta algo flamantes, aunque con la obligatoriedad de que los empleados se encuentren localizados en Atlantic City ya se mitigaría la costumbre de tener al trabajador en un país extranjero.
Por otra parte, el Senador parece alardear sobre las instalaciones de alta tecnología con los que cuentan pero lo que se le escapa es que precisamente está habiendo muchos problemas con los actuales licenciatarios nacionales pues fueron obligados a alojar los servidores dentro de los centros de los casinos, que aún están lejos de estar preparados para albergar alta tecnología. En un principio, la iniciativa planteaba la obligatoriedad de establecerlos en el Estado de Nueva Jersey pero finalmente se decidió por restringirlo a la ciudad de Atlantic City.
De entrada y con un análisis muy somero, parece que el Departamento de Justicia (institución federal) no debería tener ninguna pega con esta legislación pues en principio cae fuera de su competencia, salvo que algún colega jurista americano preste argumentos para pensar lo contrario. No obstante, la que sí tendría que tener palabra sobre la misma por el alcance del Proyecto es la Organización Mundial del Comercio.
En estos momento el Proyecto de Ley se encuentra bajo análisis del Comité del Senado de Gobierno, Juego, Turismo y Preservación Histórica y aún le queda largo camino para convertirse en Ley pero sin duda será una normativa que afecte a todas aquellas jurisdicciones en las cuales se haya legalizado el juego a través de medios remotos. ¿Cómo encajaría nuestro sistema de licencias lo que propone el Senador? ¿Presenta el Proyecto algún síntoma de aplicación viable en nuestro país? En cualquier caso, tendremos que permanecer al tanto.
Rueda de prensa del Senador Rey Lesniak https://www.youtube.com/watch?v=TK351LGzW3s
Se adjunta el PDF del Proyecto de Ley nº 3084 l. para su atenta lectura
[1]Restricted Foreign Internet Wagering (RFIW) permits
[2]ACT authorizing Internet gaming at Atlantic City casinos under 2 certain circumstances and amending and supplementing the 3 “Casino Control Act”, P.L.1977, c.110 (C.5:12-1 et seq.), and 4 repealing section 11 of P.L.2011, c.18
Patricia Lalanda Ordóñez
2 de enero de 2014.
Tambié publicado en revistas especializadas del sector: elrecreativo.com y en Joc Privat